¿Es justo llamar a la Generación Z la más sensible?
Se ha vuelto casi un cliché: cuando se habla de la Generación Z (los nacidos entre finales de los 90 y principios de los 2010), aparecen etiquetas como “la generación de cristal”, “copos de nieve” o “los más frágiles de la historia”. La pregunta es inevitable: ¿es realmente así?
Por un lado, los datos parecen confirmarlo. Encuestas globales muestran que los jóvenes de hoy reportan mayores niveles de ansiedad, depresión y estrés que generaciones anteriores (Gallup & Walton Family Foundation, 2023; El Confidencial, 2024). Es un grupo que habla más abiertamente de su salud mental, que siente la presión del futuro, la inmediatez de las redes sociales y la incertidumbre de un mundo en crisis constante. No sorprende que se les perciba como susceptibles.
Pero aquí viene la trampa: ¿eso los hace más débiles? O tal vez, simplemente, más conscientes.
Porque si miramos desde otro ángulo, la misma sensibilidad que se critica puede ser su mayor fortaleza. Son una generación que denuncia injusticias, que pone temas sobre la mesa que antes eran tabú: género, diversidad, cambio climático, salud mental. Lo que para algunos es “fragilidad”, para otros es empatía y activismo.
También es cierto que la Gen Z ha crecido en un entorno donde “lo ha tenido todo”: acceso a información ilimitada, comodidades tecnológicas, una voz amplificada por internet. Esto genera una paradoja interesante: son jóvenes más expuestos al mundo y, a la vez, más vulnerables a sus impactos emocionales. Quizá por eso reaccionan tan fuerte, porque sienten que todo les afecta, desde una noticia global hasta un comentario en Instagram.
Ahora bien, estudios como los de la psicóloga Jean Twenge muestran que la supuesta “hipersensibilidad” no es exclusiva de esta generación. De hecho, la susceptibilidad emocional tiende a estar más relacionada con la edad que con la cohorte a la que perteneces: a los 20 todos nos sentimos más inseguros, más necesitados de validación, más intensos (Science Focus, 2024). Así que el fenómeno podría repetirse con cada nueva camada juvenil.
Entonces, ¿es justo llamarlos “la generación más sensible”? Quizá no. Lo que sí podemos reconocer es que la Gen Z ha transformado la sensibilidad en visibilidad. Ya no se callan, no esconden lo que sienten, no disimulan su fragilidad. La muestran, la discuten, y a veces hasta la convierten en bandera de lucha.
La sensibilidad como brújula
Quizá la verdadera lección no es decidir si la Generación Z es la más sensible o no, sino reconocer que la sensibilidad no es un defecto: es una brújula. Puede señalar lo que duele, lo que incomoda, lo que urge cambiar. Y si algo caracteriza a esta generación es que, en lugar de ocultar su fragilidad, la convierten en motor para exigir un mundo distinto.
Tal vez ahí está la clave: su aparente fragilidad es, en realidad, otra forma de fortaleza. Porque no hay nada más valiente que atreverse a sentirlo todo… y aun así, levantar la voz.
Referencias y lecturas recomendadas
El Confidencial. (24 de octubre de 2024). Crisis de salud mental en la Generación Z: estrés diario y ansiedad creciente. El Confidencial. https://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2024-10-24/crisis-salud-mental-gen-z-estres-diario-pandemia-1qrt_3989801/
Gallup & Walton Family Foundation. (2023). Estudio sobre salud mental en la Generación Z y Millennials. La Tercera. https://www.latercera.com/que-pasa/noticia/quien-tiene-peor-salud-mental-la-generacion-z-o-los-millenials-estudio-arroja-sorprendente-resultado/IGUSW67EDBCQ3ABVSF2GBSMTTI/
Science Focus. (2024). Here’s which generation is most sensitive. BBC Science Focus. https://www.sciencefocus.com/wellbeing/heres-which-generation-is-most-sensitive
ResearchGate. (2024). La Generación Cristal y su sensibilidad por las causas sociales. ResearchGate. https://www.researchgate.net/publication/392483658_La_Generacion_Cristal_y_su_sensibilidad_por_las_causas_sociales